¿Cuándo es el momento adecuado para ir a terapia?
Escrito por Anthony Lara.
¿Esperarías a una Tormenta para Arreglar una Gotera en Tu Techo?
Pregunta Movilizadora (PM): ¿Qué señales en mi vida me dicen que es hora de explorar la psicoterapia como una herramienta para mi crecimiento personal?
¿Alguna vez has sentido que la vida no hace más que traerte más y más problemas? Puede ser una acumulación de estrés interminable en el trabajo, baches en el camino de tu vida amorosa, o un drama familiar que parece que nunca va a acabar. O talvez es algo dentro de ti, como una nube densa de depresión o ansiedad que no se disipa, o hábitos de los que no te puedes deshacer, como aferrarte a cosas que ya no necesitas o servirte una copita más porque esta vez sí va a ser la última…
Y bueno… también están esos pensamientos, ¿no? Esos que dan vueltas y vueltas en tu cabeza, o preocupaciones que no te dejan dormir bien por la noche. Todos hemos estado ahí, tratando de hacer como si nada pasara, diciéndonos a nosotr@s mism@s “vamos, tú puedes, sé más positiv@, podría ser peor…”, o desahogándonos con un amig@ con un café en la mano. Pero a veces, por más auto-cuidado1 que practiquemos, o cuántas conversaciones profundas tengamos, parece que estamos atrapados en el mismo ciclo interminable.
Así como no esperaríamos a una tormenta para reparar una gotera en nuestro techo, de igual manera no deberíamos esperar una crisis para darle atención a nuestra salud mental. A menudo, los desafíos de la vida pueden acumularse hasta que se vuelven abrumadores. Pero, ¿y si pudiéramos hacer algo antes de que estos problemas se magnifiquen?
Para no alargar el cuento
La vida puede ser abrumadora con sus retos constantes en el trabajo, la vida amorosa, y desafíos personales. A veces, a pesar de nuestros esfuerzos en auto-cuidado y apoyo de amigos, nos sentimos atrapados en ciclos de estrés, ansiedad o depresión. La terapia no debe verse como un último recurso en tiempos de crisis, sino como un cuidado preventivo y proactivo de la salud mental.
La decisión de comenzar a asistir a psicoterapia es profundamente personal y no hay una respuesta única para todos. Es un proceso dinámico y adaptable que debe sintonizarse con tu crecimiento y desarrollo personal. Escuchar a tu propia mente y cuerpo te guiará hacia la mejor decisión para ti.
Hay distintas maneras en las que podemos acceder a servicios de salud mental cuando sentimos que es necesario. Al final del artículo te comparto algunas.
Empecemos por el Principio
Antes de preguntarte, “¿Tengo que ir a terapia?”, primero pregúntate: ¿De verdad me está afectando este problema? ¿Se siente como una mochila pesada que no parezco dejar de cargar? Segundo, ¿Está interfiriendo en mi vida como una si se tratara de una barrera invisible que me impide ser mi mejor versión? Si se te hace un nudo en la garganta al leer esto, entonces puede ser que explorar el ir a psicoterapia sea el mejor paso a seguir.
La decisión de buscar terapia es profundamente personal y varía de una persona a otra. Sin embargo, existen señales universales que indican que podría ser beneficioso hablar con un profesional. Estas incluyen:
- Vivir un evento traumático, ya sea reciente o del pasado.
- Lidiar con una pérdida significativa, como el fallecimiento de un ser querido.
- Sentir una ansiedad constante y debilitante.
- Tener dificultades para concentrarse en las tareas diarias.
- Experimentar cambios en los patrones de sueño alimentación.
- Sentirse paralizado por el estrés en varias áreas de la vida.
- Sentimientos de depresión que actúan como cadenas invisibles.
- Una voz interna que susurra que algo simplemente no está bien (que no para y no se calla nunca).
Esta no es de ninguna manera una lista exhaustiva de razones para acudir a un profesional de la salud mental. Si sientes que algo de lo que has leído aquí te identifica, puede ser el momento de dar ese valiente primer paso hacia el cuidado de tu salud mental.
¿De Qué se Trata Todo Esto?
Normalmente la terapia implica reunirse con un profesional de la salud mental, ya sea de forma presencial o en línea, de manera individual o grupal. Decidir comenzar con el proceso de psicoterapia es una elección muy personal, así que tú eliges el entorno y el horario que mejor se adapte a tus necesidades.
Las razones por las que las personas buscan terapia son variadas, como en algunos de los casos que te he contado antes. Es por esto que algunas van cada semana durante años, mientras que otras sólo necesitan de unas cuantas sesiones. Lo más importante es que si sientes la necesidad de hablar con alguien ahora mismo, o si los problemas están afectando seriamente tu vida, probablemente sea el momento adecuado para empezar.
La terapia es más que una respuesta a una crisis; es una forma de cuidado preventivo y parte de un enfoque holístico hacia el bienestar. La meditación, el ejercicio y una nutrición adecuada son prácticas de auto-cuidado que pueden complementar la terapia, fortaleciendo tu salud mental en general. Su objetivo es explorar las causas profundas de tus pensamientos, emociones y comportamientos. Tu terapeuta puede ayudarte a identificar patrones dañinos y asistirte en el proceso de ajuste y adaptación. Y, así como buscarías a un profesional para reparar las goteras de tu casa, sería prudente buscar un profesional para trabajar en tus posibles “goteras” mentales.
Buscar ayuda es un signo de fortaleza.
La decisión de comenzar es personal y se adapta a tus necesidades individuales. Escuchar a tu mente y cuerpo es fundamental para guiarte hacia la mejor decisión para ti. Te animo a compartir tus pensamientos y experiencias en los comentarios. A veces, oír las historias de otros puede darnos el impulso necesario para empezar nuestro propio viaje hacia la sanación.